
Productores se capacitan para mejorar calidad de la leche
Como parte del proyecto Desarrollo de la Gestión de Calidad en los centros de acopio de leche y queserías artesanales, mejorando de manera continua la calidad de la producción láctea de pequeños y medianos ganaderos de la provincia del Carchi, impulsado por parte de la Prefectura a través de la Dirección de Desarrollo Económico Local, se realizan capacitaciones en diferentes sectores de la provincia.
En este sentido, el último fin de semana se organizó la capacitación en el barrio San Isidro de la parroquia La Libertad, cantón Espejo, donde concurrieron productores de leche de las asociaciones Emprendedores Libertenses y El Vicundo Dos, además de recolectores que trabajan como intermediarios entre la organización y las empresas que producen derivados de la leche.
Enrique Díaz, técnico de la Dirección de Desarrollo Económico Local de la Prefectura del Carchi, señaló que la capacitación se enfocó principalmente en hablar sobre calidad de leche y manejo de mastitis (enfermedad bovina que se presenta como una inflamación de la glándula mamaria de la ubre en los mamíferos, a causa de infecciones, traumatismos o intoxicaciones que afectan la salud de la ubre, pudiendo llegar hasta obstruir la eyección de leche).
Durante el encuentro se enfatizó sobre el aseo del ordeñador y la forma adecuada de asear la ubre de las vacas, recomendaciones que a decir del técnico, de ser aplicadas de manera correcta, garantizan la calidad de la leche.
Díaz explicó que en este proyecto se realizan pruebas frecuentes para determinar la calidad de la leche, estas pruebas pueden ser la reductasa (enfocada a determinar la calidad higiénica de la leche ya que estima de manera cualitativa la posible carga bacteriana que está interrelacionada directamente con el número de horas que dura en consumirse el azul de metileno en la muestra de leche) y el TEST de CMT (California Mastitis Test.- prueba que sirve para calificar la calidad sanitaria de la leche, estimando la concentración de células somáticas presentes en la muestra de leche).
“Estamos aportando para que nuestros productores mejoren la calidad de la leche, les explicamos que estas pruebas son fáciles y económicas de realizar por cualquier productor y son las herramientas que nos permitirán lograr mejores índices y alcanzar los niveles que exigen las normas técnicas en esta materia y la cual también exigen las empresas que compran el producto”, añadió.
Por su parte, Flabio Villarreal, productor del barrio San Isidro, reconoció el apoyo que están recibiendo con estas capacitaciones, indicando que es un incentivo para mejorar y así aspirar un mejor precio en la leche, pero advierte que debe ser un compromiso de todos, porque si no apoyan todos, por unos pocos se daña la calidad al mezclar en el tanque de enfriamiento.
“Están muy bien estas capacitaciones, ojalá sigan apoyándonos así y se pueda mejorar el precio, por nuestra parte estamos aplicando las recomendaciones y los resultados son buenos, pero esperamos que los demás hagan conciencia y así no perder la calidad”, dijo.
La leche a 37 grados, recién ordeñada de una vaca sana, está prácticamente libre de bacterias. Los microrganismos capaces de deteriorar la leche están en todas partes: en las ubres, en las manos del ordeñador, en partículas presentes en el aire, en gotas de agua, en la paja, en los pelos de la vaca y en el suelo.